jueves, julio 29, 2004

N-ORTUS (cuento)

 Prolongada es la noche para Juan Manuel. Los suspiros y quejidos que oye no provienen de la habitación contigua; se originan según su sentido, de abajo.
 Se pregunta - ¿Pero que ruido extraño puede venir del sótano, si solo existen herramientas y maquinas arruinadas, viejas e inútiles?.
 Medita en levantarse para averiguar... pero cada vez son más intensos; decide entonces esforzar su mente y tratar de reconocer si los mismos pertenecen a varias personas... ¿son de algún animal?... continua con la primera hipótesis.
- ¿Cuántas serán y a que sexo pertenecen? -
- ¡Si, es de un bebe! – lo puede oír ahora nítidamente.
- ¿Qué hace allá abajo? ¿por qué susurra en estos momentos? ¿qué paso con los suspiros?... balbucea... ¿qué quiere?... ¿llora?. – Sí, de forma extraña.
- Seguramente es el cansancio que llevo después la preocupación de semanas, sin saber a quien recurrir para hacer ese “trabajito” luego de una fácil decisión. – Se justifica.
 Juan Manuel no puede conciliar el sueño... no lo sabe pero su interrumpida hija le reclama por la vida que no le permitió disfrutar... 
 Largas noches serán las de Juan Manuel.

Hernan
17/05/1999

viernes, julio 23, 2004

El hombre duplicado


 “Bueno, ya sabe lo que dicen, contesta Azul. Todo hombre tiene su doble en alguna parte”.
Fantasmas – La trilogía de Nueva York – Paul Auster

 Siempre recuerdo con cariño, cuando éramos niños, sobre una teoría un poco disparatada pero original que hizo circular mi amigo Leo Casalino una tarde en su casa del barrio Belgrano... sobre “La antimateria”. Según lo había leído de un tal Paul Dirac, decía que en alguna parte del mundo cada uno de nosotros tiene un doble; un individuo idéntico en todo sentido. Un igual, no un parecido, no un clon, no una copia; ya que los dos son originales, genuinos y reales. Si por esos caprichos de la vida se encuentran, se pueden reflejar, se pueden mirar, saludarse, hasta conversar; pero si se tocan se produciría un reventón, se desintegrarían los dos.
 Pase largas noches despabilado imaginando donde podía vivir mi “antimateria”, ¿en algún lugar de Australia? ¿América Central? ¿Europa? o tal vez en mi país. ¿Cómo estará compuesta su familia? ¿será un triunfador? ¿un perdedor?. ¿Tendré ocasión de conocerlo algún día?... tonteras que pensaba en aquella época para que el sueño se apodere de mí. Todo este comentario viene, porque hoy otra vez me confundieron.
 Mientras caminaba de regreso a casa al medio día, un señor; no se quien era, nunca lo vi; circulaba en una moto y me toco bocina insistentemente, gritándome: “¡Perdón por lo de las pizzas, perdón por lo de las pizzas, después arreglamos... saludos a Mónica!”... mi cara delineo una sonrisa con los contornos del signo de pregunta (¿?). Y, cómo me miraba con entusiasmo esperando una respuesta mientras se alejaba, no me quedo otra alternativa que gritarle "¡Dale, no hay problema, chau!" saludándolo con la mano.
 Ya son varias las situaciones de estas características por las que pase, pero llego a la conclusión que en todas estas, fueron solo saludos; pero nunca pude dialogar con el confundido y pregúntale el nombre de la persona por la cual me estan confundiendo.
 Quiero estar tranquilo que mi “antimateria” no ande caminando por mi ciudad, no sea cosa que tropecemos algún día de frente, choquemos o nos rocemos y se produzca un chisperio, una hecatombe.
 Seguiré investigando, prometo detalles.

lunes, julio 12, 2004

H. W. B.

El Domingo pasado haciendo zapping no encontré nada interesante. ¿Porque será que cuando uno esta dispuesto a sentarse y relajarse para ver tv, todo lo que pasan es aburrido?, lo único rescatable fue ver por un canal que jamás visito: People and Art, una biografía de un religioso norteamericano que nunca leí ni escuche, su nombre: Henry Ward Beecher. Aparentemente era muy apreciado por su sentido del humor. Una anécdota que describía este documental, me causo risa, por el ingenio del clérigo... Un día recibió en su iglesia una carta dirigía hacia él donde alguien le escribió una sola palabra agresiva entre signos de exclamación “¡PUTO!”. Beecher con un magnífico reflejo mental comento enseguida: “He conocido a muchas personas que escriben cartas y se olvidan de firmarlas; pero este es el primer caso de alguien que firma la carta y olvida redactarla”.


miércoles, julio 07, 2004

Ridiculeses de chicos

En tiempo de descanso, conversando con mi compañero de trabajo Daniel, comentábamos cuales eran los miedos en nuestra infancia. Me causo risa cuando me revelo que tenia terror ¡al Chavo del ocho y a Kojak!. No me supo dar una interpretación él porque de esta impresión que le causaba estos personajes. Cree que lo de Kojak puede ser por el parecido de un tío abuelo solterón de testa pulida que tenia la voz gruesa y que era mal hablado. Con lo del Chavo, debe ser (según Daniel) que ese niño con pecas tenia cara “rara”, rasgos de adulto.
Pero mis temores si que eran absurdos, aquí los presento:
Los gitanos, me resultaban terroríficos, me provocaban el llanto; en parte la mala fama la agrandaron mis padres al asegurarme que robaban chicos. Con el tiempo descubrí que era para que no saliera a jugar en horas de la siesta.
Los payasos, otros especímenes que suscitaban mi desesperación, no tengo un explicación lógica el porque del temor que les tenia.
Y por ultimo... Carlos Gardel, no es que sea un anti-tangero, pero no lo podía ver en la tv ni en fotos, me entregaba una sensación fantasmagórica, el rostro blanco peinado a la perfección y con esa refinada voz, parecía del mas allá.
Fueron muchas noches que no dormí de miedo luego de ver la figura de Gardel; me pasaba a la cama de mi abuela para poder dormir seguro de que Carlitos no me cantaria en la almohada.
Hasta estos días le tengo un poco de prejuicio al pobre zorzal criollo, sobre todo cuando escucho esas viejas grabaciones; escuchar cantar a una persona muerta hace años me produce estremecimiento... bueno, pero por suerte con la era digital lo pintaron a Carlitos en las películas. Mis favoritas: "Cuesta abajo" y "El día que me quieras", pero ojo las ví en color y acompañado.
Hasta luego.


texto que se mostrará cuando mantengas el mouse encima de la imagen



sábado, julio 03, 2004

Maldita gripe

Mi cuerpo esta alejándose de una inoportuna gripe, que me instaló en cama hace tres días. Hoy me siento mejor, los mareos ya pasaron y por suerte ya no tengo los ojos irritados, pero la espalda aún duele.
Hace cuatros años que venia sosteniendo un glorioso record en no enfermarme. Hay un contagio popular (es la época del año) por lo tanto todos mis amigos, compañeros y familiares son sospechosos de haber quebrado mi interno libro Guinness en mantenerme sano.
Aproveche estos días de ahogo en la cama (con pañuelo en mano) para ver tv. El menú fue atrayente; me intereso ver en los informativos las reseñas y tributos que le hacían a Marlon Brando y observando las películas que hizo este actor que ya se marchó. Haciendo memoria... ¡Solo vi Superman I! ¡que mal! ¡no miré ninguna en el que Marlon fuese protagonista!.
Me impresionó como murió en la penuria, cuando ganaba fortunas por filmar y lo más lamentable ver ese gordo cuerpo, cuando en sus años mozos tenia un modelado aspecto.
Me dio mucha pena como se puede abandonar así una persona.
En esta semana me alquilo las consideradas principales películas de Don Brando, este será mi sencillo homenaje, aunque los canales de televisión oportunos por el negocio pasaran algunas, es cuestión de esperar.
Mientras tanto yo debo seguir esperando en que se vaya esta gripe, no soy tan “duro” como “Don Vito Corleone”.